8 de marzo de 1976
Se dice que esta meditación despeja las nubes emocionales y mentales, fomenta la autoconfianza y ajusta la percepción. Alinea la proyección y fortalece la autoimagen, previniendo acciones erráticas derivadas de la inseguridad o la duda. Con el tiempo, la práctica puede desarrollar profundas habilidades de comunicación, agudizar la memoria y asegurar que tus palabras resuenen en los demás.
Los efectos físicos y energéticos pueden incluir la estimulación del tálamo, la glándula pineal y la pituitaria, el equilibrio de la secreción hormonal y la expansión de la consciencia. La práctica regular energiza el sistema nervioso, creando una sensación de vitalidad e iluminación. Los efectos notables suelen comenzar después de 120 días de práctica comprometida y sincera.
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